He seguido sin embargo manteniendo viva mi pasión por el enoturismo y esta Semana Santa he aprovechado para realizar una visita que hacía tiempo tenía ganas de cumplir. Se trata de a la Fundación ALÍCIA (ALImentación y cienCIA) y el conjunto de Món San Benet, que como podréis ver engloba además de la Fundación, un espacio medieval, la casa de la familia del pintor modernista, Ramón Casas, los huertos de la Fundación ALÍCIA, un hotel, un par de restaurantes etc. Todo un polo de atracción turística hacia la Catalunya interior, una de las regiones menos valoradas seguramente por los propios catalanes.
La fundación ALÍCIA fue creada en 2004, bajo el amparo de la Generalitat de Catalunya y la obra social de Caixa Manresa. Cuenta entre sus asesores con el chef Ferrán Adrià y el cardiólogo Valentí Fuster. Entre los objetivos de esta Fundación, destaca convertirse en un núcleo de relevancia en la investigación aplicada a la gastronomía y un lugar de generación de ideas y experiencias innovadoras en alimentación y cocina. ALICIA desempeña también un papel importante en la concienciación social sobre la importancia de la alimentación como hecho cultural y factor educativo etc.
Tuvimos ocasión de conocer el núcleo duro de trabajo de la Fundación ALÍCIA: la gran área de cocina, algunos aparatos de laboratorio reconvertidos en utensilios de cocina, e incluso hacer un taller en torno a los sentidos; divertido, lúdico, de perfil de iniciación evidentemente pero interesante.
Hubo algo que me extrañó en esta visita y en cierta medida me desilusionó. Ni una palabra de vino. ¿En la cultura Mediterránea el vino no forma parte de la alimentación? ¿No estamos además en plena comarca del Pla del Bagues, una de las DO menos conocidas de Catalunya y donde el cultivo de la vid forma parte de la cultura y el territorio? (De este territorio guardo un estupendo recuerdo de Abadal y muy especialmente de su Tinto Reserva Abadal 3.9 un vino de una enorme mineralizad, que Sergi Mora, el encargado de enoturismo, nos hizo maridar con chocolates de Enric Rovira Enric Rovira)
Creo que todos los profesionales del enoturismo luchamos contra el posicionamiento del vino y el turismo del vino vinculado a consumo de alcohol. Es verdad que en la tienda de ALICIA se encuentran numerosos vinos y cavas pero un posicionamiento claro de la Fundación sobre las ventajas aportadas por el consumo responsable de vino, haría mucho a favor del enoturismo y de nuestros caldos. Y por supuesto de las bodegas de la comarca.
Tal y como os comentaba, tuve ocasión de hacer un taller sobre los sentidos. Fijaos si el vino, podria dar juego en un taller de este tipo. Ni una palabra, ni siquiera un comentario.
La educación de los niños y los adolescentes en torno a los hábitos alimentarios forma parte clave de los intereses de la Fundación y tuvimos ocasión de ver el “atrezzo” de diferentes talleres. Los he revisado igualmente en Internet y no he encontrado nada al respecto. He leído sobre talleres de cocina medieval, talleres de cocina con productos venidos de América, sobre las frutas, cazuelas y probetas, taller del desayuno… y un taller sobre los sentidos, ventanas del cuerpo, en torno a la percepción. No sé si por aquí vendrá alguna referencia al mundo del vino. Pero tengo pocas esperanzas.
Sabemos que educar a los jóvenes y a los niños en torno a los aromas, agrandando su esfera de conocimiento más allá de los sabores dulzones, es una de las formas más sencillas de hacerles futuros usuarios responsables del vino, haciéndoles huir de las litronas y las bebidas con altos niveles de alcohol, enmascaradas en zumos, colas etc.
Tuve ocasión también dentro del Espacio Món San Benet de visitar el antiguo Monasterio del siglo XII, que cuenta con una preciosa Bodega en la que no hay ni un solo objeto que recuerde al vino, barricas o similares. La guía no hizo ninguna referencia al vino, ni en la época actual ni en el pasado y lo que es aún más triste. En un espacio acomodado con bancadas dentro del Celler, tuvimos ocasión de ver una animación multimedia. Estaba segura que en ese momento nos presentarían alguna referencia a la viticultura de la zona, el vino en la historia, vino y monasterios, vino y alimentación… “Res de res” ni una palabra.
¿Es tabú en la Fundación ALÍCIA hablar de vino? Quiero pensar que no pero tengo pocos argumentos para defender la idea contraria.
(C) Alicia Estrada, 2010.
Y una pena, también, que nadie haya publicado comentarios a esta entrada... Gracias por la información y las opiniones.
ResponderEliminarUn saludo,
Javier Ochoa
Gracias Javier por compartir tus comentarios con nosotros. La verdad es que siempre se agradecen los comentarios, al menos te dan pistas sobre si los demás veis las cosas cómo las veo yo, porque en ocasiones, tenemos visiones parceladas y nos faltan datos...
ResponderEliminarOjalá fuera eso y los de Alícia, realmente privilegiaran la cultura del vino.
Querida Alicia, creo que tus percepciones son oportunas pero no las comparto
ResponderEliminarPor fin algo en lo que no coincidimos.
De entrada te corrijo, el maridaje que hicimos en Abadal, no lo sugirió Sergio sino el que te escribe.(http://www.turismo20.com/profiles/blog/show?id=932414%3ABlogPost%3A56719) En aquellos entonces Sergio acaba de aterrizar en la bodega y desaconocia tal vez las posibilidades ludicas.
Mon San Benet se que tiene muchos detractores, pero creo que su vinculación vinicola es totalmente transversal. Su posicionamiento es gastronómico.
Coincido que es una lastima que tal vez no se hable de vino, pero es que el vino esta a tan pocos metros que creo que no es tan dificil hacer una visita en Mon San Benet y acercarse hasta cualquiera de sus bodegas, es un complemento. Creo que sus ejes comunicativos son claros, cultura, territorio y gastronomia. El vino no creo que tuviera que tener mas protagonismo del que ya tiene en el propio Pla del Bages.
Por cierto un poco mas y coincidimos ¡¡¡
Yo estuve comiendo el domingo de pascua. Me ahorré la visita y los audiovisuales jejejeje
Agradezco tu rectificación Manel, respecto a la organización de la visita y te pido disculpas por la confusión. Sé muy bien que fuiste el padre del invento que sirvió para convertir lo que hasta entonces había sido una e-amistad, nacida en un foro de vino y turismo, en un grupo de amigos en torno al vino.
ResponderEliminarRespecto a lo que nos comentas de la fundación Alícia, evidentemente respeto tu opinión pero no la comparto. Supongo que los responsables de Alícia tendrán una opinión más próxima a la tuya que a la mía y querrán centrarse en la gastronomía exclusivamente. Sigo pensando que para el vino en general, el vino de la DO Pla del B. en concreto y el vino catalán, sería un buen espaldarazo, especialmente si nos ayudaran a desvestir el enoturismo del consumo de alcohol y vincularlo a salud, dieta mediterránea y patrimonio cultural.
Por cierto, te llamo un día de éstos y seguimos discutiendo en torno a una copa de vino.
Estoy convencido de que venden ahora mas vino que nunca... en especial las bodegas de Abadal. La locomotora que ha supuesto el proyecto liderado por su presindente, ahora ya jubilado, el Sr. Roqueta y propietario de las bodegas de Abadal no me cabe la menor duda que tenia muy presente sus vinos cuando se ideó el proyecto. A veces es mejors insinuar que enseñar, es un secreto de la seducción.
ResponderEliminarNo hablar del vino no quiere decir que no este presente, mas bya se han plantado viñas para su investigación... daran que hablar, ya lo veras.
Y lo del encuentro era una simple puntualización, no sabes porque pero a veces despues de un encuentro se producen desencuentros... y no lo digo por vosotros que gracias a Dios aun conservo ente mis amistades
Se te aprecia Manel, ya lo sabes. Hace tiempo que nos conocemos y compartimos la afición al mundo del vino y las clases en la universidad y espero que algún día, algún proyecto común.
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